ÉSTA ES LA (puta) CUESTIÓN

Hay veces en las que una apuesta puede cambiarlo todo…
Hay veces en las que no queda mas remedio que apostar el todo por el todo y todo se reduce a un resultado, el cual puede ser positivo o negativo. Todo es ganar o perder, el mismo dilema de siempre…

Y tu, tu eres el todo, y yo, yo solo soy la que apuesta, formo parte del todo como una vulgar parte, una parte que tiene la ventaja o desventaja de tener la última palabra, una parte que no quisiera estar en la posición en la que se encuentra ahora. Una parte que en estos momentos se odia a si misma por ser como es, por pensar como piensa, por no ser como el resto de las partes… bueno, después de todo… no soy tan vulgar… no creo que haya otro ser sobre la tierra que alcance tal grado de estupidez, y por qué no decirlo, de cobardía. ¿O no es cobardía lo que me impide apostar el todo por el todo? ¿y si simplemente he adoptado el "complejo de condón" previniendo que tú y yo no terminemos estampados contra el suelo?
Es que ya me estoy imaginado la escena… dos cadáveres pálidos como la cera, uno al lado del otro, boca arriba y alrededor un cordón policial, dos ambulancias y un médico forense afirmando lo que los policías y los curiosos que pasaban por allí ya sabían… Están muertos, es lo que pasa por hacer apuestas que no conducen a nada, que tienen un resultado mas que negativo, mortífero. Corrieron en contra del tiempo y la distancia, y acabaron dándose un porrazo tremendo contra el suelo, contra la realidad…

Y ya sabes que soy la primera que apuesta, que no le tengo miedo al riesgo, solo respeto. Sabes que soy la primera que se dejaría llevar, porque en esta apuesta, yo tengo la última palabra según tú, pero no soy la única parte implicada… No puedo jugar contra un fantasma, ni puedo hacer milagros, ni puedo dejar de pensar en los daños colaterales… Ganar o perder…Ganarte o perderte, esa es la puta cuestión… Y puede que le esté dando mas vueltas a esto de lo necesario, y puede que mañana se me crucen los cables y me dé por hacer lo que ya llevo tiempo pensando… romper el cupón de mi apuesta y mandar a la mierda el sentido común, creo que ese es mi verdadero problema, exceso de sentido común! Y tu…tu puedes llegar a ser un remedio bastante bueno para mi enfermedad…

Tú Javi, tu y solo tu…

Pd: maldito! tendría que estar estudiando documentación! ... esta te la guardo...
Pd2: the power of two! xD

APUNTES Y UNA CERVEZA PARLANCHINA (cóctel explosivo)

No lo parece, pero detrás de esa mirada feroz, hay unos ojos que no saben ver. Una cerveza a medio acabar grita desesperada que le pegue ya de una vez los tres sorbos que le faltan para vaciar su líquido. Porque las cervezas, al menos las botellas (no se si pasará con las latas) son mas felices una vez ya han sido acabadas, el porqué, todavía no lo sé. El caso es que la botella que estaba a mi lado, me habló.

El alcohol no es el mejor de los amigos, pero consuela en los ratos de histeria emocional. No puedo ofrecerte más, no doy para mucho más… solo soy una pobre cerveza, mírame, tu por lo menos no sabes cómo vas a morir, yo en cambio sí. Acabaré en alguna basura si tengo suerte, si no, estaré rota en mil pedazos en alguna sucia calle o en el rincón de algún garito mugriento. Tengo una función muy limitada, emborrachar a la gente, y eso, si ya se han chispado antes con alguna que otra bebida con más grados de alcohol, si no, soy casi insignificante…

Joder ¿la puta cerveza me está sermoneando? Pero que sabrá ella de todos los males que sufro. Qué sabrá ella, si hasta hace poco ni si quiera me gustaba (mucho). Hay que joderse, encima me cuenta su vida ¿no se supone que tendría que ser al revés?…

… En serio, tengo una vida algo patética. Mi consuelo es que al ser cerveza, da igual el color y el sabor que tenga, suelo estar al lado de la gente en buenos momentos. Esa es la única razón por la que no me he cambiado de trabajo. Si quisiese, y sin ir mas lejos, podría dejar de ser cerveza para ser Ron o Vodka, y ser el doble de fuerte, pero no, prefiero ser lo que soy. Además, para ser como el Vodka, tendría que estudiar como mínimo dos años y luego presentarme a las oposiciones. Que va, que va… echándole un vistazo a mi vida, creo que no soy tan patética. Creo que no he sido capaz de mirar mas allá de mi translúcido cristal, pero tu, tu me has ayudado…

¿Qué yo le que? Si llevo media hora intentando concentrarme en el caos que tengo organizado en la mesa, si llevo media hora sin coger la botella que descansa a mi izquierda, es decir, sin cogerte, si llevo media hora haciendo amago de que estoy estudiando, pero no puedo… Y sí, en este caso en concreto, no quiero estudiar y no puedo, se cumple la maldita "profecía" pero a la inversa. ¿Cómo narices he ayudado a una botella de cerveza a ver su vida tal y como es y no como se empeña ella en pintarla?

...Es mucho mas sencillo de lo que crees… “No lo parece, pero detrás de esa mirada feroz, hay unos ojos que no saben ver” me has dado la solución a todos mis males, fue sin querer, fue queriendo… eso ya no lo sé, y me da igual. Y sin saberlo, también te has respondido a ti misma… espero que sepas lo que tienes que hacer…

Flipando-yo-estoy-flipando. No estoy muy segura de entender lo que me ha dicho la cerveza, pero yo, lo intentaré. Intentaré ver las cosas tal y como son y por ejemplo, no me ahogaré en un mar de apuntes de una sola asignatura, me arrancaré de cuajo, si hace falta, las pupilas de mis ojos y haré que me implanten otras si esa es la mejor solución… pero te juro, amiga mía, que nunca más me ahogaré en un vaso de agua pudiendo tirarme directamente a un tanque lleno de tiburones (al menos en la segunda situación tengo motivos para la histeria ¿pero en un vaso? ¡Venga ya! en un vaso hago pie)


Pd: yo, y mis diálogos conmigo misma… va a ser verdad eso de que se me ha ido la cabeza… (por cierto, es divertido ver el mundo tal y como lo ve una cerveza…recomiendo esa experiencia)xD

OCURRENCIAS QUE VIENEN Y VAN...

Hoy voy a escribir porque sí. Porque le he dado la semana libre a mi ángel de la inspiración, el cual todo hay que decirlo, no suele trabajar mucho, pero bueno, el otro día hablando me confesó que era un coñazo trabajar para mí, que cuando me ponía a escribir en serio no salía nada provechoso, y que cuando me dejaba llevar, es decir, cuando fundía las teclas del ordenador sin estar él presente, las combinaciones de palabras y oraciones encajaban mejor…
Y que estaba un poco harto de mí. (Y yo de él, dicho sea de paso).

Estoy un poco hasta el culo de todo… de Madrid, de las críticas vertidas sobre ésta, de los ultras anti-bolonia de mi facultad que se las dan de tolerantes, liberales y comunistas hasta la médula y luego… pobre del que simpatice con el plan… menuda panda de periodistas, publicistas y comunicadores estamos hechos…

Estoy hasta el culo de mis vecinos, esos que para putear te dejan el despertador encendido media hora (sin estar ellos dentro de la habitación, lo cual me lleva a pensar que el acto fue totalmente premeditado). Hasta el culo estoy también de mi otro vecino, del cual podría llegar a escribir su biografía amorosa, que si la novia lo dejó por un sms de móvil, que si él no se merecía eso, que si ella era una guarra que se liaba con el primero que se le ponía delante…
A mi izquierda tengo la novela mala de la TVE, a mi derecha, el campo de batalla.

Estoy hasta el culo de la falsedad, de tener que hacerle la pelota a los profes (sobre todo a los que me caen como una patada en el culo) para que asocien mi nombre con mi cara. De la política, que la odio, soy un animal apolítico con algún que otro día de excepción en el cuál me olvido de mi pasotismo con respecto a ésta… Sería feliz viviendo en la selva, como Mowgli.

Estoy hasta el culo de ser lo que se supone que debo ser. De ser tan confiada y desconfiada a la vez. De Eurovisión, del fútbol, del baloncesto, de lo que tengo que hacer y de lo que no debo hacer…

Vamos, que hoy, estoy mejor que nunca conmigo misma y peor con el resto…

Debe ser que irme a dormir escuchando esto, afectó a mi subconsciente mas consciente… y que hoy, si me dan una ametralladora, arrasaría con todo…



A mi ángel de la inspiración: espero que te lo estés pasando de muerte allá, por Nueva Zelanda…

UN MAL DÍA

Hay días en los que me encantaría tirarme por la ventana, hay días en los que es mejor quedarse en la cama con el edredón (si es de Ikea mejor) hasta la frente, formando una barrera imaginaria que te proteja de los posibles peligros que acechan fuera de tu fortaleza particular. También tengo días en los que me chiflaría ofrecerme voluntaria para que me hicieran una lobotomía, y otros en los que simplemente no soy yo, soy un engendro humano con el cerebro desgastado de tanto usarlo como arma química nuclear contra mi misma. Debe ser que me encanta coger un estropajo y restregármelo por las heridas. Debe ser que cuando tengo un mal día da la casualidad de que me aburro tanto, que para remediar mi aburrimiento tengo que ensañarme conmigo misma. Sí, ahora que lo pienso, debe ser eso…

Soy la pastilla antifelicidad cuando quiero y me concentro mucho. Si alguien quiere alguna dosis de mí, no tiene mas que ir a la farmacia mas cercana y pedirme. Pocos son los remedios que me alivian un mal día porque ya que me levanto con el pie derecho (los zurdos cuando tenemos un mal día nos levantamos con el pie derecho, no con el izquierdo) ni me molesto en caminar con el otro, de antemano sé que gastaré energías inútilmente en intentar una recuperación que se que va a llegar al día siguiente. Así que cierro los ojos e intento “disfrutar” con la lluvia de meteoritos que cae sobre mí. Efectivamente, intento sacar algo bueno de lo malo.
Tomo nota y me preparo, me preparo para sentir el peso de mi alma descender a lo mas profundo de mi ser. ¡Oh! Eso es lo peor, lo peor de tener un mal día, lo peor de que los planetas se alineen y me hayan mirado veinte tuertos. Que luego, cuanto mas lejano se me antoja ese día, más estúpida me siento. Vuelvo a abrir mi cuaderno de notas y empiezo a leer…

Los motivos no faltaron, pero tampoco sobraban… Y ya está no hay mas vueltas que darle porque un mal día lo tiene cualquiera, viva donde viva, hable el idioma que hable, sea la persona mas feliz o mas desdichada de este mundo…

Un mal día no se elige, él te elige a ti.

Pd: Tengo que darle las gracias a Ana por haber aguantado heroicamente el ataque de mamitis extra aguda (y alguna que otra cosa más) que se apoderó de mí el domingo… gracias, gracias y gracias…

Pd2: parece mentira que lo único que me hiciera sonreír el Domingo fuera esta canción…

EL PUNTO DE NO RETORNO

He llegado a un punto en el que ya no hay vuelta atrás, sabía que esto podía llegar a suceder y según mis previsiones, sucedió, de hecho, en este mismo momento, hace un segundo, hace dos, hace tres… ya era plenamente consciente de ello. Al final he sido derrotada, arrasada. Mi enemigo me ha dejado tendida en el suelo agonizando de manera inhumana, y yo ya no tengo fuerzas ni para levantarme, coger mi caballo blanco y salir huyendo furtivamente de la zona catastrófica.

Querer es poder, dicen por ahí muchos que ya lo tienen todo (o que creen tenerlo)… a todos esos, hablando en plata, les digo que se vayan a la mierda, que entren en ella, cierren la puerta (blindada) con llave y la tiren al otro lado, a ver si aún queriendo salir de allí, pueden hacerlo.
Porque yo, por mas que quiera resurgir de mis cenizas, no tengo el poder suficiente como para hacerlo, de momento no.
Al menos tengo la certeza de que en un futuro, si es que no muero por hemorragia, volveré a la carga de nuevo.

Al principio pensaba que la situación no pasaría de blanco a castaño oscuro… y dejé el portón de mi muralla de piedra abierto de par en par.
¡Que ingenua fui! Ahora sé que nunca más volveré a hacerlo… ahora sé que bajar la guardia y confiar demasiado en mi propio poder emocional fue un error que nunca volveré a cometer (aunque de antemano sepa que lo mas probable es que vuelva a bajar la guardia y el enemigo se cuele dentro otra vez). Mientras tanto, mientras pensaba que era inmune a las pequeñas e intermitentes bolas de fuego que me lanzaba mi enemigo, éste casi sin darme cuenta ya había metido dentro de mi fortaleza a un centenar de hombres de su maligno ejército. El enfrentamiento no había hecho nada más que empezar…

Cuando quise echarlos y cerrar a cal y canto mis puertas, obviamente fue demasiado tarde… Me superaban en número y fuerza. Me cogieron totalmente desprevenida y me superaban en todo, además, para empeorar mas las cosas, les temía. Ahora no es que sienta aprecio por ellos, pero ya no les tengo miedo. Total, ¿qué mas pueden hacerme si ya estoy con un pie en el inframundo? Lo mejor que puedo hacer a estas alturas es aceptar mi derrota… por mucho que me cueste… por mucho que se empeñe mi mente, el centro de mi fortaleza, ya está tomado por el enemigo, y yo… tendida en el suelo debatiéndome entre la vida y la muerte reprochándome a mi misma: que mal perder tienes Itziar, que mal perder tienes…

Nt: este texto, que ahora sale a la luz fue creado hace algo más de una semana, me leo y pienso en lo dramática y alarmista que soy. Me horrorizo de mi propia manera de sobrellevar los “problemas”. Pues hace una semana, me veía en el punto de no retorno (estos maquiavélicos sentimientos de mierda). Y Ahora, bueno, ahora me lo tomo con humor, que ya es un paso…