24 de agosto de 2009

AMOR...NUNCA UNA PALABRA DIO MAS REPELÚS


Mi definición de Amor: estado transitorio por el que una persona
pasa inevitablemente varias veces en la vida. (O solamente una
dependiendo del sujeto en cuestión). Tal estado de enamoramiento
llega a negar las capacidades cognoscitivas de la persona dejándola
indefensa ante el mundo. Este estado es fácilmente identificable debido al número alarmante de suspiros por minuto que puede llegar a hacer
el afectado.

Cómo reconocerlo: el amor suele llamar a la puerta de uno
y se suele pagar a contra reembolso o con tarjeta de crédito
del corte inglés (por el día de los enamorados, ya saben).

Extras incluidos en el pack: un par de tarros de cristal para
guardar las neuronas sanas (las que todavía no han sido contagiadas
por el virus) + una venda extra grande para los ojos + toda la discografía
de Luis Miguel.

Bueno...me llamo Itziar, vine al mundo hace dieciocho años y no me gusta el amor. Odio los culebrones cutres de antena tres y TVE pero no le hago ascos a una buena (o mala) película o libro de amor en la que haya un final feliz. No quiero tener a un caballero esperándome en su caballo blanco ni tener que besar ranas que se conviertan en apuestos príncipes que me prometan amor eterno. No quiero tener que darle la mano a ese señor que llaman amor ni besar el suelo por el que pisa ni hacerle la pelota para que llame a mi puerta. Ya me cansé de príncipes de pega, de ranas que aunque se vistan de príncipes ranas se quedan, pero sobretodo ya me cansé de ti. Prefiero mil veces una amistad en la que haya cariño, afecto, incluso hasta un grado lógico de dependencia, a un amor que te atonte las neuronas y te bloquee los cincos sentidos y te convierta en un vegetal profundo.

Hace tiempo que dejé de soñar para poner los pies en la tierra (aunque debo confesar que nunca podré dejar de soñar dada mi naturaleza fantasiosa y fastidiosa, porque esto de soñar hasta cuando se está con los ojos abiertos es, hablando rápido y mal, jodido),ya es hora de empezar a caminar esquivando piedras. Unos tacharían de imposible mi labor, esquivar piedras… ni hasta el hombre más hábil puede evitar encontrarse con la horma de su zapato, ni tan siquiera podría evitar que durante el camino le entrasen en su zapato minúsculas piedras que dificultasen su tarea de caminar. Pero… ¿yo? yo no soy un hombre…

Pd: en realidad no odio el amor en sí…ni estoy en contra del amor ni nada parecido. Simplemente detesto los efectos secundarios…
Como mujer, a parte de sentirme mas fina y segura al ponerme las compresas de Ausonia y de ser infinitamente más feliz con las de evax y poder dar saltos mortales con un tampax, me gustan las cosas “pastelosas” (pero sin pasarse).

Pd2: y la canción, que no viene a cuento, simplemente es porque no puedo dejar de escucharla.



22 de agosto de 2009

MARCHANDO UNA CIRUGÍA ESTÉTICA

Anoche me pasó algo increíble, que me dejó con la boca abierta, casi desencajada, descompuesta. Anoche mi blog me habló. Efectivamente, yo también sería reacia a creer semejante estupidez, yo también me hubiera reído. Los hechos sucedieron de la siguiente manera: estaba yo pensando en escribir algo nuevo, algo que no hubiera escrito antes, algo que no fuera sobre Bruce Springsteen dada la facilidad que tengo para hablar y hablar y no parar de hablar de ese hombre, algo que tampoco fuera sobre mí, ya que también tengo una habilidad pasmosa para describir algún aspecto de mi misma o de mi vida y vamos, tampoco es plan de utilizar el blog como si fuera el diario de Patricia… además, tampoco es que me guste demasiado eso de exhibir mi lado invisible. Estaba, como iba diciendo, pensando mientras Joe Satriani ejercía de banda sonora con “come on baby” de su último disco y entonces sucedió…fue como si se me hubiera aparecido la virgen de Fátima (o la madre que la parió, que a efectos es lo mismo, el puto susto no te lo quita nadie).

De la pantalla del ordenador emergió una nariz puntiaguda, unos labios finos y un par de ojos bien abiertos. (Juro que no había bebido, ni fumado ni pinchado, ni esnifado nada que hubiera podido alterar mis sentidos ya alterados de por si). No cabía la menor duda, aquella cosa quería algo de mí ¿el qué? (ni puta idea). Apagué el ordenador deprisa y corriendo y bajé volando a refugiarme en mi cama. Era tarde, la hora de dormir se me había escapado por muy poco y la próxima no pasaba por mi parada hasta dentro un par de horas aproximadamente… Vamos, que no tenía ni pizca de sueño. Y me puse a pensar nuevamente a ver si esta vez no salía nada extraño de debajo de la cama o de la pared… Finalmente me dormí… A la mañana siguiente, al despertar vi una nota pegada a la pared escrita a ordenador (times new roman del 12) por lo que pude identificar, decía así:

“O me regalas una cirugía estética, o dimito,
renuncio, me jubilo o me voy de vacaciones
indefinidas. Tu verás…
Antentamente, Tu Blog.”


Pd: está claro que me acojoné...

3 de agosto de 2009

UNA NOCHE MAS QUE MÁGICA


Fue culpa de Nils Lofgren… juro y perjuro que yo, no hice nada. Solo mirar, oir y cantar la letra de algún que otro estribillo que buenamente me sabía. Y es que hace ya casi tres años el nombre de Bruce Springsteen (no diré que me sonaba a chino porque antes de nacer ya lo estaba escuchando desde el vientre de mi madre) se me antojaba como ese tío “pesao” que soltaba gritos carrasposos acompañados por unas melodías que me sonaban a las bandas sonoras de las pelis cutres de antena tres de los domingos. Menos mal que el ser humano es un ser medianamente inteligente que tiende hacia el cambio, hacia la evolución, de lo contrario no se qué sería de mi… hubiera seguido juzgando al mismísimo y todopoderoso Bruce Springsteen a la ligera, como si nada, sin duda, un pecado capital. Y Bruce no tuvo absolutamente nada que ver en el proceso de “transición” y adaptación a su música rock. Ya dije que la culpa fue de Nils Lofgren, ese hombre de cuerpo menudo y manos de oro que de vez en cuando se marca unos solos de guitarra que quitan el hipo… ese hombre que lleva 25 años tocando con la E-street Band a la vera de Springsteen y que mucha gente (esa es la sensación que me da) infravalora.

Está claro que Bruce indiscutiblemente es Bruce, gran músico, figura que no solo es la voz, sino que además es una de las guitarras de la E-Street Band. Razón por la cual puede que Nils, en ocasiones, caiga en el olvido. Si estuviera en mis manos, haría una campaña de publicidad a favor de Nils. Si al jefe no se le da mal eso de rasguear las cuerdas de su mítica y legendaria Telecaster, Nils se eleva a la categoría de ser supremo. Con un estilo a medio camino entre Rory Gallagher y Jimmy Page la noche del 25 de noviembre de 2007 en el palacio de los deportes, no tuve mas remedio que rendirme ante él, y de paso ante aquella banda de Nueva Jersey (líder incluido, sí). La música de Bruce había empezado a calar hondo en mí gracias al buen hacer de su veterano guitarrista. Y que le voy a hacer si por culpa de aquel desconocido, se me metió en la cabeza (hasta el presente) gastarme medios ahorros (si no enteros) en una Fender como la de Nils, o la de Springsteen…

Aquella noche, fue mas que mágica, y siempre la recordaré como la noche en que reviví un viejo hobby aparcado en el arcén…tocar la guitarra, pero esta vez, la eléctrica…