16 de diciembre de 2010

GAMER, PARA PEGARSE UN TIRO

No suelo escribir muchas críticas cinematográficas, debería ir acostumbrándome, ahora que lo pienso (exigencias del guión, bueno, mas bien del plan de estudios de mi carrera). El caso es que, esto de las críticas es muy personal, nunca llueve a gusto de todos y para gustos está el mundo lleno de colores. Anoche, mientras dejaba aparcados los libros durante un rato, guiándome por el consejo de un amigo, accedí a ver la que tal vez fuera la peor película que mis ojos han visto, y eso que he visto auténticos bodrios, pero ninguno como el de anoche. Dios mío, creo que hasta me he desencantado un poco con el cine de acción. Gamer, así se titula el dichoso film dirigido por Brian Taylor y Mark Neveldine (Crank) y protagonizado por un tibio pero guapo Gerald Butler (300, Pd: te quiero).


Verán, la película no tiene absolutamente nada. Y cuando digo nada, es nada. Bueno, hay que reconocer que Gerald Butler queda muy bien en pantalla y parecer ser que el director de fotografía supo (fue lo único en lo que acertó) sacar partido a la belleza natural del actor.
La película está ambientada en el futuro. Un futuro en el que la sociedad, cada vez mas de capa caída se deja seducir de manera salvaje por el mundo virtual. Los videojuegos controlan, de manera literal, a las personas. Ken Castle, interpretado por Michael C. Hal (Dexter), es el creador del mundo virtual al que millones de personas rinden pleitesía. Kable, el personaje interpretado por el guapísimo Butler, es uno de los jugadores estrellas de “Slayers” (uno de los juegos virtuales creados por el multimillonario Castle). El jugador, si quiere permanecer con vida tendrá que ir superando sangrientas batallas al mas puro estilo Fallout. Bombas, metralletas, pistolas y mucha acción, son la tónica de éste film carente de ritmo. El argumento, que se supone que es una crítica dirigida a la sociedad y a su afán de vivir inmersos en un mundo virtual, se queda en una burda caricatura de lo que puede, según los propios directores a la par que guionistas, llegar a suceder algún día. Sinceramente no creo que se llegue al punto de que una persona pueda controlar mentalmente a otra para pasar el rato, así, como quien juega a los Sims pero con personas de verdad. En cuanto a la dirección poco me queda ya por decir, la película tiene cierto estilo visual, pero nada mas. El guión, partiendo de una idea no del todo mala, hace aguas. La estética visual, siguiendo los patrones del típico videojuego de "disparar y matar al enemigo o a quien se te ponga por delante" cansa al cabo de media hora, al menos al espectador que no está familiarizado con la dinámica visual de ese tipo videojuegos. La banda sonora no es que sea para tirar cohetes y toda la adrenalina que se supone que tienes que producir al ver las escenas de acción, dan paso a una sensación de somnolencia, pero con el ruido incesante de balas, coches estrellándose, puñetazos y gritos, no hay quien duerma. Si al menos fuera una película de... yo que sé, Woody Allen o Pedro Almodóvar, por poner un par de ejemplos, pues te podrías dormir tranquilamente, pero no, Gamer de alguna manera "te obliga" a mantener los ojos abiertos. Lo dicho, para pegarse un tiro.

Conclusión: Gerald Butler es lo único por lo que merece la pena ver la película. Y si no te gusta Butler, pues bueno, mejor que no la veas. xD

No hay comentarios: